Este 28 de agosto se celebra el Día Nacional de las Personas Adultas Mayores, con el objetivo de reconocer a las personas de 60 y más, quienes aportan al desarrollo cultural, social, económico y político de nuestro país. Es importante reconocer los retos de esta generación, así como brindar claves para envejecer con plenitud. Sigue leyendo.
Por Redacción HEP
La pirámide poblacional se está invirtiendo a nivel global y se espera que para 2030, haya más personas de 60 años y más, que niños de 0 a 10 años. Además, la esperanza de vida ha aumentado y se espera que haya una mayor participación de personas adultas mayores en todos los ámbitos sociales.
Por ello, hoy se habla de que haya una sociedad más incluyente que favorezca la integración e inclusión plena y efectiva de las personas de la tercera edad, así como el reconocimiento de las necesidades de esta generación e iniciativas para fomentar su bienestar físico, social, emocional y mental.
De acuerdo con el Sistema de Información Estratégica en Salud, Dependencia Funcional y Envejecimiento (SIESDE), en México hay más de 15 millones de personas de 60 y 7 de cada 10 padecen alguna afección crónica.
«Es necesario fomentar las condiciones necesarias de salud, educación, empleo, vivienda, seguridad y esparcimiento con el propósito de alcanzar una vejez digna y saludable en toda la población”, afirma la Dra. Abigail Vanessa Rojas Huerta, investigadora del Instituto de Geografía de la UNAM.
Uno de los mayores desafíos a nivel mundial tiene que ver con el crecimiento acelerado de la población envejecida: las bajas tasas de natalidad y el aumento de la esperanza de vida ha provocado que la estructura etaria de las poblaciones esté cambiando.
En este sentido, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ha establecido cinco principios básicos para cualquier política dirigida a los adultos mayores: independencia, participación, recepción y provisión de cuidados, autorrealización, y dignidad.
Durante mucho tiempo, la vejez se asoció con la decadencia y debilidad ya que las sociedades tienden a valorar la juventud y la vitalidad.
No obstante, están surgiendo nuevos términos y enfoques para referirse a la etapa de vida entre los 60 y 80 años.
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“Aunque cada vez se incluye más gente mayor en la publicidad que antes, todavía existen prejuicios en relación al envejecimiento”, reconoce la Dra. Ana Laura Morales, psicóloga y Directora Clínica de CórimAZ, quien fue nuestra invitada en el episodio La nueva longevidad, un enfoque fresco sobre envejecer.
5 CLAVES PARA VIVIR CON PLENITUD Y BIENESTAR ESTA ETAPA DE VIDA
La Dra. Ana Laura Morales, psicóloga y Directora Clínica nos compartió 5 claves para vivir con plenitud y bienestar esta etapa:
1. Pon como prioridad tu salud física: Es importante mantener el cuerpo en movimiento y nunca es tarde para encontrar las actividades que más te apasionan. Nadar, hacer yoga y caminar son ejercicios muy benéficos, no olvides cuidar también tu alimentación.
2. Fortalece tus capacidades cognitivas: Es importante mantener activo tu cerebro. Nunca es demasiado tarde para aprender un nuevo idioma, tocar un instrumento musical o practicar una disciplina artística nueva. Incluso esos jueguitos de habilidad en el celular que son como gimnasia para nuestro cerebro. ¡Ya no te sientas culpable de dedicarles un poco de tiempo!
3. Realiza actividades constructivas: Realizar algún voluntariado en tu comunidad es una buena opción para contribuir a tu entorno, aprender algo nuevo y compartir tu sabiduría con otras personas. Es increíble lo mucho que podemos aportar al mundo al apoyar causas ambientales y sociales.
4. Cultiva vínculos emocionales saludables: Es muy importante que cuentes con una red de amistades y familiares donde encuentres contención y apoyo, además del que puedes brindar tú. Organiza viajes, experiencias, debates o grupos de lectura que fomenten la interacción, esto enriquecerá a tu círculo cercano.
5. Acércate a la espiritualidad: Puede ser a través de la meditación, mindfulness o tus creencias religiosas, esto te dará paz interior y te ayudará a aceptar los cambios inminentes. Sentirte parte de algo más grande te ayuda a poner las cosas en perspectiva.
La Dra. Ana Laura Morales dice que “lo más importante es aceptar que la vejez es una época de transición, llena de cambios. Es por ello que al adoptar estas prácticas podemos hacerlos más llevaderos y entenderlos mejor”.
